¿Murió Jesús en la cruz?


Desde tiempos antiguos, diversas tradiciones señalan que Jesús no murió en la cruz sino que huyó a la India, hacia Cachemira, donde antes habría vivido desde los doce hasta los treinta años de edad, época cuando reaparece en la escena pública. Según esos planteamientos, en la India habría recibido sabias enseñanzas de grandes maestros iniciados. Las especulaciones señalan igualmente que en Cachemira existe el cadáver de un maestro enterrado, con muchas similitudes físicas con la persona de Jesús de Nazaret. Todo esto nos hace preguntarnos… ¿Se encontraba realmente muerto Jesús cuando fue bajado de la cruz? ¿Era su cadáver lo que fue envuelto en el sudario y luego co­locado en el sepulcro por José de Arimatea y Nicodemus? Diversos autores e investigadores de la vida de Jesús afirman que este murió en Cachemira, a avanzada edad. Según ellos, “la persona que murió en la cruz pudo ser un hermano gemelo o simplemente, herido, fue rescatado de la cruz y curado por sus allegados”. Según las especulaciones, lo que quisieron signi­ficar los autores evangélicos no era una muerte real, sino que Jesús se encontraba en un estado de inconsciencia que fue tomado por muerte por parte del Centurión romano. “Es evidente que el Centurión se encontraba en un estado de confusión a causa de la tormenta, la oscuridad y el terremoto que aconteció en aquel momento” (Mat. 27, 54). Pilatos, el gobernador de la provincia, quizás menos afectado por el fenómeno natural gracias a los fuertes muros de su palacio, se encontraba en mejor disposición mental. Por ello, cuan­do fue informado de la supuesta muerte de Jesús, dudó y mostró su sorpresa ex­clamando: ¿Murió tan pronto?, lo que induce a pensar que surgió la duda al respecto en quienes esta­ban familiarizados con la crucifixión. Por experiencia, Pilatos sabía el largo tiempo que necesitaba una persona salu­dable para morir en la cruz. El Evangelio de Juan, considerado como el evan­gelio más antiguo, plantea una afirmación muy im­portante: “Entonces llegaron los soldados y rompieron las piernas del primero y el segundo hombre que estaban crucificados junto a él; pero cuando llegaron a Jesús y observaron que ya estaba muerto, no rompieron sus piernas, por lo que un soldado, con una lanza, atravesó su costado, y entonces brotó sangre y agua de su cuerpo” (Juan 19, 32-34). ¿Qué significa esto? Obviamente indi­caba que la conclusión de los soldados romanos de que “Jesús estaba muerto”, fue una conclusión equivocada, ya que se encontraba aun vivo, pues su corazón bombeaba sangre. De encontrarse muerto, su corazón se hubiera detenido y no bro­taría sangre de su cuerpo. No ha de  extrañar que se salva­ra de una humillante muerte en la cruz, puesto que, según la Biblia, la muerte en la cruz, era una muerte maldita; y tanto El Nuevo como El Antiguo Testamen­to coinciden en señalar que todo el que muriera en la cruz era maldito (Deut. 21, 23. Gala. 3, 13). Una persona maldita es aque­lla que se encuentra totalmente privada de la gra­cia y amor divinos. Entonces ¿Cómo podría Dios permitir que su amado Jesús muriera en la cruz? ¿Cómo podría Jesús ser llamado maldito cuando era el amado hijo de Dios? El alto rango que Jesús mantenía en la Presencia de Dios Todopoderoso es irreconciliable con la idea de que muriera como un maldito. Las pruebas contenidas en las Escrituras hacen pensar que sobrevivió a la cruz, Y esto es exactamente lo que debió haber ocurrido si tenemos presente las fervientes plegarias y profundas súplicas de Jesús descritas minuciosamente en los evangelios: “Jesús rezó a Dios toda la noche, postrado y con lágrimas para que fuera salvado”. ¿Es posible creer que tales ple­garias pudieran ser desoídas? Para los católicos es difícil creer que las súplicas agonizantes de un elegi­do de Dios hayan podido ser desatendidas, máxime cuando a lo largo de todo su ministerio Jesús había insistido a sus discípulos sobre la importancia y eficacia de las plegarias. Continuará.           

insolitohz@gmail.com   

1 comentario:

  1. Me doy cuenta con todo respeto a tu persona, que estás documentado acerca de esas Sectas,
    ahora lo que te falta es documentarte honesta y sinceramente con la Palabra de Dios así como lo hiciste con lo otro.
    Marcos 12:24
    Entonces respondiendo Jesús, les dijo: ¿No erráis por esto, porque ignoráis las Escrituras, y el poder de Dios?

    ResponderEliminar